Casa por voto
El déficit habitacional en Venezuela constituye un gran problema actualmente para quienes sufren el pesar de no tener hogar y para el gobierno nacional que se ha planteado el reto de solventar esta situación. Al problema en sí se le han atribuido varias causas, pero la más actual y cierta es la presencia de torrenciales lluvias que han dejado a más de uno sin techo para protegerse.
¿Pero esto debería suceder?, si hasta donde recuerdo Venezuela aunque es un país subdesarrollado (por eso de que existe pobreza, marginalidad, entre otras cosas) tiene las herramientas necesarias para que quienes habitamos en su suelo tengamos todo por lo que trabajamos.
Como es posible que las rentas hayan subido tanto que en una casa vivan más de tres familias, como es posible que los materiales para construir tengas altos costos y que de paso no se consigan por ningún lado, como es posible que las personas recurran a la invasión para poder tener donde vivir.
Lo bueno, por así decirlo, es que el gobierno nacional creo la Gran Misión Vivienda para solventar esta situación, ahora pienso yo, no será muy tarde. Después de quien sabe cuántos proyectos, de miles y miles de censos, de cambiarle el nombre al ministerio encargado del tema de la vivienda y más aún después de doce años de gobierno, es justo y necesario brincar y correr para de alguna forma solucionar.
Pensemos mal, el gobierno pretende crear 150.000 viviendas solo este año, que además ya va por junio, 200.000 el próximo y así sucesivamente, no será esto una estrategia para obligar a la gente a votar otra vez por 6 años más de destrucción del país.
Otra cosa que me hizo pensar, es que amigos que fueron al censo me comentaron que había maquinas capta huellas, para qué es esto, para ver si firme (en eso de la lista Tascón) o vuelvo a pensar mal, será para hacer trampa.
Espero que el final de esta historia sea como un cuento de hadas, felices para siempre, que las intenciones del gobierno sean justas, que el pueblo no se deje hipnotizar y recuerde lo que ha vivido durante doce años y que piense en el futuro de ellos y de sus hijos. Me queda pensar que solo hay vivienda para el que vote.
Texto: Ana Cecilia Rivas